Parte de nuestro tiempo lo dedicamos todos los días a estar al tanto de lo que sucede a nuestro alrededor, de estar al día. Hoy leemos en uno de los blogs que consultamos: «Ya que los artículos que publicamos en nuestras páginas de empresa dentro de Facebook son cada vez menos visibles (en raras ocasiones llegan a ser vistos por el 10% de todos los que marcaron “me gusta” en la página)…» y entonces me conecto a las páginas de empresa que gestionamos para comprobar la cifra y… no me cuadra. En el peor de los casos tenemos una media de un 33-38% (baja a un 17-20% en ocasiones) y en el resto de páginas supera el 50% sin problemas.
En mi opinión, existe cierta obsesión en conseguir fans para las páginas de empresa. En parte es normal, es parte de la labor y una manera de justificar el trabajo de un gestor de redes sociales, pero nosotros preferimos tener menos fans pero de calidad, a tener muchos pero desinteresados. Preferimos realizar una estrategia online donde localizar nichos de clientes y enfocar esfuerzos en atraerlos a nuestra página o en crear comunidad y dotarla de contenido interesante para ellos.
No todas las empresas tienen nicho en Facebook (esto es algo obvio pero que algunos parece que no lo acaban de entender , aunque también hay quien «coloca» esta parte innecesaria a sus clientes), y en los casos en que exista nicho en esta red social, lo que les tienes que aportar a tus seguidores es información de su interés, información de calidad. Obvio, también.
Mencionamos Facebook, pero lo mismo podemos aplicar a otras redes, Twitter, G+, un canal de Youtube (recurso muy interesante en muchos casos para empresas), Pinterest…
¿Qué sucede en algunos casos? Puede que no se haya realizado una estrategia para la presencia en redes sociales, puede que la haya pero no se esté aplicando bien, puede que la empresa no sea capaz de generar contenido de calidad… pueden ser varios los factores.
¿Cuál puede ser una solución? Es básico entender el cómo funcionan estas redes. Analizar qué gusta o no, qué interesa, qué se comparte, qué se comenta… y ofrecérselo a nuestros fans.
La situación óptima sería que la empresa gestionase internamente su página en Facebook, o su cuenta de Twitter, su canal de Youtube, su perfil de Google+, su… pero la experiencia nos dice que la mayoría de ellas, aunque lo quiera hacer, no tiene personal formado ni tiempo para hacerlo. Entonces entramos en juego profesionales que gestionamos redes sociales basándonos en estrategias online y en un conocimiento de la empresa. Es fundamental que la empresa confíe en quien le pueda gestionar su presencia en internet. Que le comunique sus planes, su labor diaria, sus planes a futuro, sus intereses, su competencia, sus puntos fuertes y los débiles, concretar objetivos y facilitar la labor del gestor de redes. Y nosotros, adquirir el hábito de pensar como el cliente. Tenemos que confiar mutuamente y, después, gestionar sus redes sociales.
Y, entonces, ya volveremos a comparar las cifras.