1.000 camisetas marcadas en frente y espalda, el último trabajo entregado.
Hemos ahorrado al cliente un 22,5% encargándonos nosotros de elegir al proveedor. En ocasiones, el cliente siente la tentación, o la necesidad, de ser él quien directamente trate con un proveedor. Creo que es un error en la mayoría de los casos.
El conocimiento de opciones, posibilidades, características… es difícil que las tenga y es muy fácil que le puedan dar «gato por liebre» o confundir.
En este trabajo en concreto, el modelo de camiseta es exactamente el mismo que el que se había valorado, pero lo hemos conseguido más económico, entre otras cosas, por nuestra muy buena relación con nuestro proveedor (y porque nuestros márgenes son muy ajustados).
Mirar cómo quedan: